sábado, 8 de enero de 2011

Seguimos con los higos

El sector primario puede volver a generar empleos dignamente retribuidos, siempre que la actividad se diseñe adecuadamente.
Los higos (especialmente los secos) constituyeron para los guanches un nutriente básico, hasta el punto que se han encontrado entre los dientes de algunas momias, semillas de higos.
Además de su rico sabor y sus excelentes cualidades nutricionales puede representar un elemento autóctono singular en la gastronomía insular. Y con dos grandes ventajas: combinando alturas (desde la costa hasta los mil metros) y variedades sería posible dispones casi todo el año higos frescos; y pueden crecer en terrenos áridos y poco fértiles, por lo que no compiten con otros cultivos y se pueden plantar en terrenos actualmente poco aprovechados.
Presentaría un inconveniente: tarda varios años en dar fruto.
Para eso proponemos, que la dedicación a su cultivo se combine, bien con otras producciones más rápidas como las huertas urbanas en terrazas y balcones o su plantación en huertas mixtas de permacultura en superficie más higueras en altura.
También podríamos combinarlo, una vez en producción con las experiencias "de higos" que comentábamos ayer.
Y podemos arrendar minihuertos para que quienes viven en pisos puedan tener sus árboles y verduras, en su caso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario